El país latinoamericano captará aproximadamente US$27.000 millones del comercio entre Estados Unidos y China, esto representaría alrededor del 6% de las exportaciones totales de México.
Una leyenda urbana cuenta que la grafía de la palabra crisis en chino significa peligro, pero también oportunidad.
Muchos lo disputan como una traducción equivocada, pero en la política mundial, parece cobrar sentido. Al menos, si tenemos en cuenta los efectos beneficiosos para algunos países de la guerra comercial de Estados Unidos contra China.
Y es que, si bien la disputa entre las dos economías más grandes del mundo ha sido un importante factor de riesgo para los inversores desde el pasado año y ha puesto bajo amenaza las perspectivas económicas de los países de la región de Asia pacífico, también podría traer notables ganancias a otros si el conflicto se prolonga.
Principalmente a naciones europeas, México y Canadá, según un informe de la Conferencia de las naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
“Nuestro análisis muestra que si bien los aranceles bilaterales no son muy efectivos para proteger a las empresas nacionales, son instrumentos muy válidos para limitar el comercio desde el país afectado”, explicó Pamela Coke-Hamilton, directora de la división de comercio internacional de la organización.
La razón es simple: los aranceles bilaterales alteran la competitividad global en beneficio de las empresas que operan en países que no están directamente afectados por ellas.
De ahí que, según Coke-Hamilton, el efecto de los aranceles entre Estados Unidos y China será principalmente “distorsionador”.
“El comercio bilateral entre Estados Unidos y China disminuirá y será reemplazo por el comercio originado en otros países”, agrego.
Y es entonces cuando otras naciones que comercian con esas dos potencias pueden obtener su tajada de ganancias.

LA GUINDA DEL PASTEL
El estudio advierte que los aranceles “hacen poco por ayudar a las empresas nacionales” de Estados Unidos y China y, por el contrario, terminan beneficiando a exportadores en terceros países.
De hecho, según los cálculos de la ONU, de los US$250.000 millones en exportaciones chinas sujetas a aranceles estadounidenses, aproximadamente el 82% se desviará a empresas en otros países.
Mientras, aproximadamente el 12% serán retenido por empresas chinas y solo el 6% serán irá manos firmas estadounidenses.
De manera similar, de los aproximadamente US$85.000 millones en exportaciones de EE.UU. sujetos a los aranceles de China, alrededor del 85% serán capturados por empresas de otros países.
Entre tanto, de ese total, las firmas estadounidenses solo retendrán menos 10%, mientras que las empresas chinas capturarán alrededor del 5%.
La investigación señala que estos resultados son consistentes en diferentes sectores, desde maquinaria hasta muebles, equipos de comunicación, productos químicos o instrumentos de precisión.
Fuente: El Comercio Perú